Ad Libitum Tempranillo Blanco

Ad Libitum Tempranillo Blanco ¿Merece la pena este vino?

El vino Ad Libitum Tempranillo Blanco con la impronta de Juan Carlos Sancha, quizás de los mejores bodegueros de Rioja y apreciado profesor universitario, presumiblemente el individuo con más información sobre clones vid del mundo. Se le considera el pionero de los últimos restos de surtidos locales de Rioja que, por culpa de individuos como él, no se han acabado. La consecuencia de este Tempranillo blanco es un vino untuoso y diligente.

Bodegas Juan Carlos Sancha

Sancha es una de las máximas autoridades en materia de surtido de uvas. Almacena todos los clones de uva del planeta en su sede de Viticultura y Enología de la Universidad de La Rioja. A él acuden personas de todo el mundo en busca de orientación.

En 2008 llegó a la conclusión de que su entusiasmo por el universo del vino debía llevarle a elaborar vino. En su pueblo, Baños de Río Tobía, se había hecho vino desde siempre, pero él esperaba hacer una interpretación de su amplia información en la formación de vinos que hablaran como ningún otro de la tierra donde fue concebido.

Junto con un socio, emprendió la misión de explorar hasta el último pedazo de tierra de la D.O.Ca. Rioja para encontrar y recuperar surtidos locales que estaban a punto de desaparecer hasta el fin de los tiempos. Se habían perdido proactivamente unos 18 surtidos en un largo periodo y no creían que este goteo constante debiera continuar.

Gracias a este trabajo de investigación, se salvaron de la desaparición 27 surtidos, entre ellos Tempranillo blanco, Maturana tinta, Maturana blanca y Monastel de Rioja. Una vez asegurados estos grandes surtidos, se inició la etapa posterior, la elaboración de fabulosos vinos con estas uvas.

También ha elaborado vinos excepcionalmente exquisitos con Garnacha, cuando era el principal surtido en Rioja y actualmente especialmente minoritario. Por ello, hemos llegado a referirnos a Sancha como «artesano y repartidor».

El inicio de Sancha

Sancha comenzó a establecer plantaciones de uva en 1997 con vistas a la que tenía previsto crear en un par de años, y explotó las antiguas plantaciones de uva de la familia que se remontan a 1917. Creó 9 hectáreas de su propia plantación de uva y dejó la experiencia. Hoy en día trabaja las plantaciones de uva de la forma más habitual y elabora unos vinos fantásticos, rebosantes de carácter, estilo, novedad y cercanía.

Estos vinos son una aproximación inmediata al conocimiento de una tierra y de sus surtidos, ya que este especialista en enología desestima en gran medida la presentación de surtidos desconocidos que motivan, según él, la normalización del vino.

Notas de Cata

Ad Libitum Tempranillo Blanco

Las notas de manzana verde, cítricos y piña destacan en el sabor. El sentido del gusto es voluminoso y glicérico, ácido y nuevo, con una construcción abundante y una diligencia extraordinaria.

Maridaje

Ad Libitum Tempranillo Blanco es un gran maridaje con carnes blancas, pescados al horno y cualquier tipo de carnes.

Vinificación de Ad Libitum Tempranillo Blanco

Las uvas despalilladas se trasladan a una pequeña prensa ascendente. A continuación, se realiza un trasiego estático y se termina la maduración a una temperatura de 15 ºC en depósitos de acero tratado.

Uva Tempranillo Blanco

Este surtido procede del cambio regular de una planta de tempranillo tinto situada en una antigua plantación de uva en Murillo del Río Leza, en La Rioja, en 1988. La localización del cambio se produjo cuando el cultivador de la planta vio que los sarmientos de esa planta eran todos sarmientos de uva tinta, a excepción de uno que daba grupos de bayas blancas. 

No se trata de una circunstancia anormal, ya que se han producido cambios comparables en otros surtidos de uva, por ejemplo, la pinot noir que dio lugar a la pinot gris y la garnacha tinta que se transformó en garnacha blanca. Hay que pensar que, aunque no sea extremadamente regular, la transformación es un ciclo característico y que se trata de un cambio de albinismo como el que ocurre en las personas. Con esta variedad se produce el vino Ad Libitum Tempranillo Blanco.

Una vez realizadas las investigaciones y comprobaciones importantes, se comprobó que los contrastes ampelográficos entre el tempranillo tinto y este nuevo surtido son escasos. A excepción de la tonalidad de la baya y de diferentes cuestiones como el tamaño más modesto de la hoja y el envase. Por otra parte, los dos surtidos comparten aptitudes agronómicas similares.

Entre las investigaciones y exámenes realizados, el retrato con marcadores atómicos verificó que la similitud hereditaria del ADN entre los surtidos rojo y blanco es del 97,8%. En este sentido, los dos surtidos tienen genotipos muy cercanos.

La planta transformada se puso a disposición del Centro de Investigación y Desarrollo Agrario de La Rioja para que se completaran las investigaciones y los exámenes de adecuación para que pudiera empezar a duplicarse.

Esta cepa no existe en ningún otro lugar del planeta

Es una planta de desarrollo semiprofesional, de potencia media-alta, de maduración temprana, de ciclo extremadamente corto y de gran riqueza. Con un rendimiento típico que oscila entre los 7.500 y los 9.000 kilos por hectárea, superando los rendimientos homologados en La Rioja. 

Debido a su crianza inicial y a la rapidez con la que recoge los azúcares, no es juicioso aplazar la recolección. Se cría bien en tierra y no le afectan los hielos del final del invierno, actuando de forma similar a su hermana roja.

Esta variedad se adapta bien a las podas cortas; sin embargo, es delicada al retorcimiento, por lo que se recomienda su cultivo en espaldera. Al igual que el Tempranillo tinto, tiene una baja aversión a la botrytis, es delicada a la polilla de la vid y extremadamente delicada a la acariosis, aunque prácticamente no tiene una aversión extraordinaria a las enfermedades. La presión de riego y las altas temperaturas no son excepcionalmente seguras.

Los racimos son de tamaño medio, libres y con tallos extremadamente cortos. Las bayas son igualmente de tamaño medio y algo enderezadas. La brotación es tardía, pero el envero y la maduración son tempranos, lo que permite terminar el ciclo incluso en regiones de gran altitud. Esta es una ventaja que le permite adaptarse a diversas circunstancias.

Al igual que la tinta Tempranillo de la que parte, produce vinos de fantástica calidad, con gran causticidad completa. Con una alta sustancia corrosiva málica y una alta agrupación de mezclas inestables con olores afrutados.

Son vinos de color amarillo verdoso, como el Ad Libitum Tempranillo Blanco con una fragancia característica por su contenido en terpenos y otras mezclas inestables con serias notas afrutadas y botánicas de productos orgánicos tropicales. Plátano, manzana, cítricos; en boca son vinos ajustados, con una extraordinaria construcción y una perseverancia media-larga en boca.

La armonía entre el contenido en licor, la corrosividad y el contenido polifenólico lo convierten en un surtido razonable tanto para la elaboración de vinos jóvenes como para los vinos destinados a la crianza en barrica como lo es el Ad Libitum Tempranillo Blanco. Ya que su calidad de surtido minoritario ayuda a dar carácter y tipicidad a estos vinos blancos elaborados en la Denominación de Origen Calificada Rioja.

Los vinos blancos monovarietales de Tempranillo presentan elevados grados de contenido en licor, nitidez absoluta, causticidad málica y polifenoles completos. Estos elevados atributos son totalmente diferentes de los surtidos que generalmente se entregan en Rioja como la Malvasía o la Garnacha Blanca.

A partir del año 2007 se ha aprobado su elaboración en la Denominación de Origen Calificada Rioja de la que parte.